Originario del Norte de Africa, desciende del gran lebrel egipcio también denominado Abker. Fue durante siglos el perro de los bereberes, y era llevado en las caravanas para la caza de la gacela del desierto. Los pueblos árabes que consideran impuros a casi todos los animales, lo conceptúan como noble hasta el punto de brindarle los mismos cuidados que a los caballos más preciosos. Es tenido en tal consideración que aún hoy, en algunos pueblos norteafricanos, si alguna perra tiene dificultades en amamantar a sus propios cachorros, son las mujeres que lo hacen, no dudando en poner a su seno a los pequeños Slougui. Su difusión en Europa y en América es bastante reciente y está unida sobre todo, a las carreras a nivel de aficionados que se llevan a cabo en algunos países europeos, aunque es bastante raro ya que, difícilmente encuentra apasionados que lo críen debido a su difícil carácter. Recientemente, la Federación Cinológica Internacional, ha reconocido una variedad de tamaño más pequeño denominada Slougui Azawar.